El territorio que comprende la Tierra Indígena Kadiwéu está localizado en el estado de Mato Grosso do Sul (MS), en el municipio de Porto Murtinho, a 60 km de la ciudad de Bonito y a 425 km de la capital Campo Grande. La Tierra Indígena (TI) abarca 539.000 hectáreas, donde viven aproximadamente 2.000 indígenas kadiwéu. En el territorio también viven los indígenas de los pueblos kinikinau, terena y chamacoco. Se ubica junto a la cuenca baja del río Paraguay , abarcando la superposición del Cerrado y el Pantanal.

Los primeros registros de la presencia de los kadiwéu en el territorio son muy antiguos, y remontan a mediados del siglo XVI a partir de los informes de las expediciones europeas en busca de metales preciosos en el interior del país. Los registros continúan y se intensifican en los siglos posteriores, como en el siglo XVIII, con el establecimiento de fuertes militares portugueses y españoles en la región. Los kadiwéu son conocidos y respetados en el estado de Mato Grosso do Sul por su participación fundamental en la Guerra del Paraguay, por la que los indios afirman haber recibido un acuerdo de protección y “demarcación” de manos del propio Don Pedro II, aunque este no les haya garantizado las tierras prometidas.

Gran parte de su territorio tiene hoy una demarcación consolidada, habiendo recibido el primer reconocimiento oficial en 1900. En 1931 se ratificaron sus límites, pero los problemas de la tierra nunca han dejado en paz a los descendientes de los Guaicurus, como también se les conoce. Existen innumerables registros de invasiones, acaparamientos y conflictos. En los actos finales de demarcación, que solo se realizó en 1981, el conflicto fue tan intenso que una parte del territorio original, llamado Xatelodo, quedó fuera del perímetro final de la Tierra Indígena.

En la década de 1950, los ocupantes ilegales y los acaparadores de tierras se contaban por miles y, en los años 80, fueron aumentando, especialmente con el incentivo del propio Servicio de Protección Indígena (SPI). Registros recientes indican que a mediados de la década de 2000 se habían invadido más de 100.000 hectáreas de Tierra Indígena Kadiwéu. Incluso después de que los indígenas retomaron la tierra tras haber luchado por recuperarla, al menos 80.000 hectáreas siguen en esta situación. En otras palabras, la lucha contra los madereros, los arrendatarios y los ganaderos continúa y, según los kadiwéu, los invasores han utilizado diversas tácticas de ocupación, como la expansión de la ganadería mediante la tala del bosque y, sobre todo, la quema.

Notas

Instituto Socioambiental (ISA). Terra Indígena Kadiwéu. En: Tierras Indígenas no Brasil.

Caio de Freitas Paes. A história e o mito dos índios cavaleiros do Pantanal, ‘decisivos’ na Guerra do Paraguai. BBC News Brasil, 07/12/2019.

Los incendios en el Pantanal aumentan vertiginosamente. Ya se han consumido 4 millones de hectáreas, de las cuales 2,9 millones fueron en 2020 y 1,165 millones de ellas solo en Mato Grosso do Sul. Esta extensión, que representa el 21% del área total del bioma (según los parámetros del Instituto Brasileño de Geografía y Estadística – IBGE), equivale a 20 veces el tamaño de la ciudad de São Paulo. Además de las sierras, los parques y las Áreas de Preservación Permanente, los incendios también han alcanzado a las comunidades ribereñas y, de forma especialmente trágica, a las tierras indígenas situadas en la región de los municipios de Corumbá, Porto Murtinho, Miranda y Aquidauana. Entre ellas, la más afectada fue la Tierra Indígena Kadiwéu.

Los perjuicios no son nuevos. En 2019 se produjo un aumento del 88% de los incendios en las Tierras Indígenas de Brasil. La Tierra Indígena Kadiwéu fue la segunda más afectada, con más de 613 focos de incendios.

Notas

Duda Menegasi. Fogo já atingiu mais de um quinto de todo Pantanal. En: O Eco, 24/09/2020.

Renato Santana y Tiago Miotto. Focos de incêndio em terras indígenas aumentaram 88% em 2019. CIMI, 10/09/2019.

Policía Federal, Funai e Ibama realizan una operación conjunta en 2019 para frenar la deforestación ilegal en la Tierra Indígena Kadiwéu en MS. Crédito: Policía Federal.
Policía Federal, Funai e Ibama realizan una operación conjunta en 2019 para frenar la deforestación ilegal en la Tierra Indígena Kadiwéu en MS. Crédito: Policía Federal.
El impacto surrealista, constante y en aumento, fue de más de 211.000 hectáreas quemadas solo entre marzo y noviembre de 2020, lo que corresponde al 39,15% del territorio.
Evolución de los incendios de agosto a octubre. Crédito: AidEnvironment (utilizando sistemas de alerta Deter Amazon 2020, NASA VIIRS fire alerts, Sentinel 2: European Union, modified Copernicus Sentinel data 2020, processed with EO Browser).
Evolución de los incendios de agosto a octubre. Crédito: AidEnvironment (utilizando sistemas de alerta Deter Amazon 2020, NASA VIIRS fire alerts, Sentinel 2: European Union, modified Copernicus Sentinel data 2020, processed with EO Browser).
Evolución de los incendios de agosto a octubre. Crédito: AidEnvironment (utilizando sistemas de alerta Deter Amazon 2020, NASA VIIRS fire alerts, Sentinel 2: European Union, modified Copernicus Sentinel data 2020, processed with EO Browser).
Evolución de los incendios de agosto a octubre. Crédito: AidEnvironment (utilizando sistemas de alerta Deter Amazon 2020, NASA VIIRS fire alerts, Sentinel 2: European Union, modified Copernicus Sentinel data 2020, processed with EO Browser).
Focos do fogo em 2020.
Focos do fogo em 2020. Crédito: AidEnvironment (utilizando sistemas de alerta Deter Amazon 2020, NASA VIIRS fire alerts, Sentinel 2: European Union, modified Copernicus Sentinel data 2020, processed with EO Browser).
211.290 hectáreas (2.110 km2) quemadas en 2020. Crédito: AidEnvironment (utilizando sistemas de alerta Deter Amazon 2020, NASA VIIRS fire alerts, Sentinel 2: European Union, modified Copernicus Sentinel data 2020, processed with EO Browser).
211.290 hectáreas (2.110 km2) quemadas en 2020. Crédito: AidEnvironment (utilizando sistemas de alerta Deter Amazon 2020, NASA VIIRS fire alerts, Sentinel 2: European Union, modified Copernicus Sentinel data 2020, processed with EO Browser).
Gilberto Kadiwéu relata que la comunidad está consternada por lo mucho que ya se ha quemado:
Son áreas enteras de bosque, plantas, raíces y árboles, nuestra medicina, gran parte de las fuentes de la cultura de nuestro pueblo se van junto a esta naturaleza, sin contar con los animales que creo que muchos de ellos ya ni siquiera existen.
Gilberto también cuenta que la comunidad ha tratado de organizarse para combatir los males que trae el fuego:
Todos los años es lo mismo. Creamos una brigada en la comunidad, jóvenes y personas que quieren ayudar, quieren acabar con el fuego. Recibimos algo de apoyo del IBAMA, pero solo lo recibimos en los meses en los que el fuego ya está llegando o ya está ardiendo, en ese periodo en el que no hay mucho ya por hacer. Siempre estamos perdiendo la batalla, siempre es más difícil apagarlo cuando llega. Nuestras demandas son que tengamos un apoyo permanente, que se piense en cómo hacer para contener el fuego antes de que empiece, que se vigilen los límites, que se piense, que se actúe en los meses en los que el fuego aún no está devastando todo.

Es bien sabido que estos incendios que asolan la Tierra Indígena Kadiwéu, y otras tierras y pueblos de Mato Grosso do Sul, son, en su mayoría, criminales e intencionados. Hace unos meses, el gobierno estatal publicó los resultados de la Operación Focus, que fiscalizó e investigó los incendios criminales en el Pantanal. Solo con la aplicación de multas fueron recaudados cerca de R$ 35 millones. Se inspeccionaron 40 propiedades y, de ellas, 19 tenían incendios activos y tres personas fueron detenidas mientras prendían fuego a la vegetación.

El foco de incendio que ha seguido el cauce del río Paraguay ha dejado en la naturaleza una cicatriz de quemado. Pero es imposible medir el tamaño de las cicatrices culturales y territoriales que quedarán en las comunidades indígenas del estado, especialmente en los kadiwéu, si la situación no se contiene urgentemente.

Matias Benno Rempel es de la CIMI Regional Mato Grosso do Sul.